La grasa del queso alpino del Oberland bernés se desarrolla entre los 5 y 7 meses. Después, se cura en una cámara (almacén) a una temperatura aproximada de 12 grados Celsius y una humedad relativa de entre el 70 y 75 % hasta que se convierte en Hobelkäse de Berna AOP. Crea su aroma único debido a las exuberantes dehesas de los Alpes, al modo de producción tradicional y al almacenamiento especial.