Le Gruyère AOP clásico le debe su delicado y típico sabor a la inmejorable leche cruda de la región. Las vacas se alimentan de pasto en verano y heno en invierno. No obstante, también son importantes las habilidades de los queseros y afinadores.
Le Gruyère AOP clásico le debe su delicado y típico sabor a la inmejorable leche cruda de la región. Las vacas se alimentan de pasto en verano y heno en invierno. No obstante, también son importantes las habilidades de los queseros y afinadores.
Los amantes del queso aprecian en todo el mundo el Gruyère AOP con su sabor especialmente aromático, una obra maestra del arte quesero suizo.